Verstappen explotó en Estados Unidos contra mecánicos y Horner le dijo: 'Tranquilízate'

En pleno Gran Premio de Estados Unidos este domingo en el circuito de Austin, Max Verstappen explotó contra los mecánicos de Red Bull Racing por culpa de una parada lenta en pits que lo mandó hasta el sexto lugar durante la Vuelta 36, incluso con Christian Horner pidiéndole que se tranquilizara.

El piloto neerlandés, quien sabemos tiene un temperamento explosivo y en ocasiones hasta caprichudo, se quejó abiertamente de los trabajadores de Red Bull a través de la radio del equipo con la frase sarcástica: "Precioso, eh, precioso", además de decir un par de malas palabras que fueron silenciadas por la transmisión oficial de la Fórmula 1.

Segundos después, Horner le dijo a Verstappen que había "un largo camino por recorrer" para recuperar el primer puesto que llevaba hasta antes de la demora de 11.1 segundos en pits, pero esas palabras del director de la escudería no hicieron más que alimentar el coraje del piloto, quien le replicó: "No necesito que me digas eso, ya sé que me retrasaron".

Esa contestación hizo que Horner le pidiera serenidad a Verstappen, tanto en su temperamento como en el resto de la carrera en Austin, que estuvo marcada por el accidente de Carlos Sainz en la largada, quedando fuera de inmediato tras haber logrado la pole position el sábado.

¿Qué pasó en la parada lenta de Verstappen?

Marchando líder del Gran Premio de Estados Unidos, Max Verstappen fue llamado a pits para cambiar neumáticos, pero hubo un problema con la pistola para birlos en la llanta delantera izquierda. 

El artefacto se trabó y tuvieron que usar una segunda herramienta, demorando la estancia en fosos del neerlandés durante 11.1 segundos, muchísimo tiempo si consideramos que las paradas promedio en F1 duran menos de 3 segundos.