Red Bull, de la mano de Checo Pérez y Max Verstappen, se llevó el doblete de la temporada 2022: el Mundial de Pilotos y el de Constructores. El éxito fue consecuencia del gran trabajo del mexicano y el neerlandés, quienes se encargaron de que la escudería austriaca ganara 17 de 22 carreras, dejando sin oportunidad a sus rivales.
Sin embargo, el equipo liderado por Christian Horner pintaba para tener una campaña muy complicada tras el doble abandono en Bahréin y la retirada de Max Verstappen en el tercer GP de la campaña, en Australia.
Ferrari había generado una buena ventaja sobre sus competidores gracias a las victorias de Leclerc en el inicio del curso, hasta que un punto de inflexión se dio en el Gran Premio de Emilia-Romagna.
Según Christian Horner, la carrera que se encargó de catapultar a su equipo al doblete en 2022 fue Imola, ya que ahí, aunque Ferrari era local, conseguir el 1-2 fue mortal para el Cavallino Rampante.
"Para mí, uno de los fines de semana cruciales fue Imola con la carrera sprint y luego la victoria. Ganar esas dos carreras, lograr el doblete final y vencer a Ferrari en su casa fue creo que psicológicamente algo grande para nosotros como equipo, y para ellos también", comentó en Motorsport.
"Desarrollamos el coche, lo mejoramos y redujimos un poco el peso, y entonces llegó la velocidad. El equipo ha estado fantástico este año", agregó el británico.
Tras ello, la dupla Pérez-Verstappen consiguió cinco victorias consecutivas, lo cual prácticamente dejó en la lona a los italianos, que pudieron rescatar la temporada con el subcampeonato de Pilotos de Charles Leclerc.
