Max Verstappen volvió a sacarle el mayor provecho a un auto que desde hace tiempo dejó de ser el mejor de la parrilla y largará desde la segunda posición en el Gran Premio de México, aunque no se mostró muy entusiasmado con la posibilidad de buscar la victoria este domingo, sabedor que hoy los Ferrari y los McLaren son muy sólidos.
En la conferencia posterior a la qualy, el piloto de Red Bull –vigente líder del Campeonato de Pilotos- reveló las opciones que cree tener de cara a la carrera, aunque fue claro en señalar las virtudes de sus contrincantes, que volvieron a demostrar su velocidad con Carlos Sainz en la pole y Lando Norris en la tercera posición.
''No espero milagros. En Austin, Ferrari fue muy rápido. McLaren no estuvo tan fuerte ese fin de semana, pero volvió a hacerlo bien en la carrera. Veremos mañana”, señaló Verstappen, quien ha ganado tres Grandes Premios de México de forma consecutiva, y cinco en total desde que es piloto de F1.
El RB20 no le daba certezas
El neerlandés señaló que fue un fin de semana complicado para él, debido a que en las prácticas su monoplaza no funcionaba como lo hubiera deseado, aunque pudo rescatar una buena vuelta en la qualy que lo llevó al segundo puesto.
''Era inútil, cero información. Por lo tanto, VT3 fue crucial para mí. Intenté hacer tantas vueltas como fuera posible, pero el coche no se sentía bien y fue muy difícil. Sabía que sería una clasificación difícil, pero con algunos ajustes sentí que las cosas iban mejor. La primera fila es un gran resultado para nosotros”
Sainz ve un Ferrari en evolución
En tanto, Carlos Sainz, pole en México, se mostró confiado en que luchará por un triunfo que le podría servir para endulzar su despedida de Ferrari, esto gracias a la evolución que ha experimentado su coche desde Austin, donde sólo quedó por detrás de Charles Leclerc, el vencedor.
