La tensión política que históricamente han tenido Corea del Sur y Corea del Norte, podría quedar de lado, al menos por un tiempo, gracias al deporte. Y es que este jueves se dio a conocer que ambos países asiáticos serían los encargados de organizar los Juegos Olímpicos del 2032 de forma conjunta.
Seúl, capital surcoreana, envió formalmente su petición al Comité Olímpico Internacional, para ser sede de la justa olímpica, junto a la enigmática Pyongyang, capital de su vecino del norte.
Hay que recordar que a pesar de los problemas diplomáticos de sus naciones, en la última justa invernal en Pyeongchang en 2018, las delegaciones de los 2 países desfilaron bajo una sola bandera, simbolizando paz y unión de sus pueblos.
"La candidatura conjunta Seúl-Pyongyang pone el acento en la consolidación de la paz que simboliza, así como en la combinación de tecnologías punta y cultura coreana", se puede leer en un escrito enviado por el Comité Olímpico de Corea del Sur.
En 2016 hubo un precedente para que los dos países comenzarán a pensar en una unión deportiva, luego de que en los juegos de Río, las gimnastas Lee Eun-ju, de Corea del Sur, y Hong Un-jong, de Corea del Norte, se tomaran una selfie, que a la postre fue considerada la mejor foto del año y una de las más importantes en la historia del deporte.
Amenazas de guerra y más tensión
Sin embargo, más allá de la buena voluntad del deporte, políticamente, tanto Corea del Sur como Corea del Norte tienen casi 2 años si relaciones cordiales y constantemente hay amenazas de uno y otro sector.
Apenas hace unos días, Corea del Norte disparó dos misiles balísticos al Mar de Japón, lo cual fue duramente condenado por autoridades surcoreanas, recriminando la peligrosidad de las pruebas nucleares que a últimos años ha hecho el gobierno de Kim Jong Un.
