James Harrison no se disculpó por lastimar a sus rivales

• Harrison es un tres veces seleccionado al Pro Bowl
• Es poco probable que Cribbs y Massaquoi jueguen en la semana 7 de la NFL

El linebacker de los Acereros de Pittsburgh, James Harrison, dejó en claro cual es su objetivo: Él quiere causar dolor a cualquier rival que se acerque a su territorio. Cuando Harrison ve a un jugador caído en el terreno de juego, él siente que ha cumplido con su trabajo. El apoyador de los Acereros tuvo la oportunidad de disfrutar la satisfacción el domingo cuando retiró del partido a los receptores abiertos de los Browns de Cleveland, Joshua Cribbs y Mohamed Massaquoi. Las lesiones fueron el resultado de fuertes golpes por parte de Harrison en el segundo cuarto; sólo unos minutos las separaron entre sí. Harrison dijo que no quiere retirar a ningún jugador del partido o poner en peligro la carrera de sus contrincantes. El ganador del premio al mejor jugador defensivo del 2008 también está consciente que puede ser difícil definir una línea entre hacerle daño a un contrincante y lastimarlo gravemente, tal y como ocurrió este domingo, pues las jugadas ocurren a máxima velocidad y se cuenta con poco tiempo para ponderar las consecuencias.