Editorial Mediotiempo
Ciudad de México
Kenyan Drake toma un respiro y se seca el sudor que le escurre por el rostro. Nunca había corrido a más de 2 mil 250 metros sobre el nivel del mar, pero tampoco le molestaría hacerlo equipado con el uniforme de Miami Dolphins frente a 87 mil personas.
El corredor de tercer año en la NFL participó en un evento altruista de la Fundación Smile Train en la Ciudad de México, donde convivió con niños con labio y paladar hendido.
Lanzó el ovoide, realizó algunas jugadas y quedó cautivado de la hospitalidad de la gente, misma a la que le gustaría complacer con un partido de su equipo en el Estadio Azteca, tal y como lo harán el 19 de noviembre próximo Los Ángeles Rams y Kansas City Chiefs.
“Seguro (le gustaría jugar en México), siento que los Dolphins deberían venir aquí, así podrían vernos muchas personas jugar y la cultura y la base de aficionados estarían emocionados no solo por nosotros sino por el juego, el viaje sería genial, la atmósfera”, dijo a Mediotiempo el egresado de Alabama.
“Amo la cultura, amo la primera impresión en las calles, una muy diferente cultura y personas, así que hay muchas comidas, cada vez que como pido dos o tres platillos así que estar aquí es genial, amo esta cultura”.
Drake no está acostumbrado a poner excusas, al contrario, la altura de la capital mexicana no le representa un problema.
“Sentí la altitud apenas llegué, caminé un poco por ahí y sentí, es diferente, así que es un desafío, nunca había estado en un lugar tan alto en mi vida así que es bueno ver a atletas que vienen a aquí o a Denver, cualquier otro lugar con altitud, es una gran experiencia”, explicó KD32, quien apenas acumuló 644 yardas y tres touchdowns.
Apenas pudo acarrear el ovoide en 133 ocasiones para alcanzar un promedio de 4.8 yardas la temporada pasada, muy pocas jugadas para un hombre que fue una de las apuestas de Miami. Pero conoce el antídoto para salir a flote.
“Debo ser yo mismo, ser paciente y solo respetar el juego en el día a día. Hay muchos grandes corredores en la NFL y para mí poder tener mi nombre ahí debo salir y hacer las mismos cosas día a día como el tipo de hombre que quiero ser, enfocarme en mis habilidades cada día con mis coaches y salir a jugar football”, aseguró.
Los Dolphins alcanzaron sus últimos Playoffs precisamente en la primera temporada de Drake en la NFL, pero fue la primera ocasión en ocho años que alcanzaban esas instancias y no pasan de ronda de Wild Card desde el 2000.
“Es similar al éxito personal, debes ser y hacer las cosas una y otra vez y estar seguro de hacer lo correcto en el campo, desde ponerte los zapatos correctos para tu cuerpo, salir y jugar football. Tenemos grandes jugadores así que creo que este año será genial porque mucha gente nos preguntará menos, la gente no espera mucho de nosotros así que solo debemos jugar nuestro juego”, respondió Kenyan sobre cuáles considera que son las claves para que los Phins vuelvan a adquirir protagonismo.
Pero la gerencia general tomó una decisión para intentar volver a los primeros planos, un plan que no beneficia del todo a Drake, pues contrataron al veterano Frank Gore en esta temporada baja, en aras de dejar de ser uno de los tres peores equipos corriendo el ovoide.
“Es genial, él (Gore) va a ser un Salón de la Fama algún día así que debo demostrar quién soy, intercambiar conocimiento es lo mejor que puedo hacer”, zanjó el joven de 24 años, quien por lo pronto, intentará demostrar por qué fue elegido en la tercera ronda del Draft de hace un par de años.
El corredor de tercer año en la NFL participó en un evento altruista de la Fundación Smile Train en la Ciudad de México, donde convivió con niños con labio y paladar hendido.
Lanzó el ovoide, realizó algunas jugadas y quedó cautivado de la hospitalidad de la gente, misma a la que le gustaría complacer con un partido de su equipo en el Estadio Azteca, tal y como lo harán el 19 de noviembre próximo Los Ángeles Rams y Kansas City Chiefs.
“Seguro (le gustaría jugar en México), siento que los Dolphins deberían venir aquí, así podrían vernos muchas personas jugar y la cultura y la base de aficionados estarían emocionados no solo por nosotros sino por el juego, el viaje sería genial, la atmósfera”, dijo a Mediotiempo el egresado de Alabama.
“Amo la cultura, amo la primera impresión en las calles, una muy diferente cultura y personas, así que hay muchas comidas, cada vez que como pido dos o tres platillos así que estar aquí es genial, amo esta cultura”.
Drake no está acostumbrado a poner excusas, al contrario, la altura de la capital mexicana no le representa un problema.
“Sentí la altitud apenas llegué, caminé un poco por ahí y sentí, es diferente, así que es un desafío, nunca había estado en un lugar tan alto en mi vida así que es bueno ver a atletas que vienen a aquí o a Denver, cualquier otro lugar con altitud, es una gran experiencia”, explicó KD32, quien apenas acumuló 644 yardas y tres touchdowns.
Apenas pudo acarrear el ovoide en 133 ocasiones para alcanzar un promedio de 4.8 yardas la temporada pasada, muy pocas jugadas para un hombre que fue una de las apuestas de Miami. Pero conoce el antídoto para salir a flote.
“Debo ser yo mismo, ser paciente y solo respetar el juego en el día a día. Hay muchos grandes corredores en la NFL y para mí poder tener mi nombre ahí debo salir y hacer las mismos cosas día a día como el tipo de hombre que quiero ser, enfocarme en mis habilidades cada día con mis coaches y salir a jugar football”, aseguró.
Los Dolphins alcanzaron sus últimos Playoffs precisamente en la primera temporada de Drake en la NFL, pero fue la primera ocasión en ocho años que alcanzaban esas instancias y no pasan de ronda de Wild Card desde el 2000.
“Es similar al éxito personal, debes ser y hacer las cosas una y otra vez y estar seguro de hacer lo correcto en el campo, desde ponerte los zapatos correctos para tu cuerpo, salir y jugar football. Tenemos grandes jugadores así que creo que este año será genial porque mucha gente nos preguntará menos, la gente no espera mucho de nosotros así que solo debemos jugar nuestro juego”, respondió Kenyan sobre cuáles considera que son las claves para que los Phins vuelvan a adquirir protagonismo.
Pero la gerencia general tomó una decisión para intentar volver a los primeros planos, un plan que no beneficia del todo a Drake, pues contrataron al veterano Frank Gore en esta temporada baja, en aras de dejar de ser uno de los tres peores equipos corriendo el ovoide.
“Es genial, él (Gore) va a ser un Salón de la Fama algún día así que debo demostrar quién soy, intercambiar conocimiento es lo mejor que puedo hacer”, zanjó el joven de 24 años, quien por lo pronto, intentará demostrar por qué fue elegido en la tercera ronda del Draft de hace un par de años.
