Los Dallas Cowboys volvieron este domingo a la senda del triunfo en casa al aplastar 38-3 a los New England Patriots, en partido correspondiente a la actividad de la Semana 4 de la NFL.
La clave de la nueva victoria de los Vaqueros, que volvieron a lucir como al inicio de la campaña tras su sorpresiva derrota ante los Arizona Cardinals, fue su defensiva, que además de mantener bajo control a la ofensiva patriota, también colaboró con puntos importantes para la causa local.
Los autores fueron DaRon Bland, que tuvo un pick six, y Leighton Vander Esch, quien recuperó un fumble hasta las diagonales en el segundo cuarto del duelo.
Del lado de los Pats, Mac Jones, quarterback de New England, tuvo un partido terrible donde lanzó para 150 yardas sin anotaciones y fue el responsable de los tres balones perdidos de su equipo, motivo por el que en la segunda mitad fue enviado a la banca. Bailey Zappe tomó su lugar pero no logró marcar diferencia para una reacción de los visitantes.
La paliza recibida por Dallas es la peor derrota de los Patriots (1-3) durante los brillantes 24 años de Bill Belichick como head coach, superando el 31-0 ante los Buffalo Bills hace 20 años, en la temporada 2003.
DEFENSE ????@dantefowler strip. @VanderEsch38 score.
— Dallas Cowboys (@dallascowboys) October 1, 2023
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El entrenador esperaba alcanzar en este duelo las 300 victorias de su carrera en la campaña regular, pero ahora tendrá que espera a la próxima semana ante los New Orleans Saints para llegar a esta cifra.

'Zeke' regresó a casa
Dak Prescott, quarterback de los Cowboys, tuvo un juego cumplidor y sin errores, donde completó 28 de 34 pases para 261 yardas aéreas. Al final del partido, ya con todo decidido, también fue reemplazado por Cooper Rush.
Mientras tanto, los Cowboys (3-1) limitaron por tierra a su ex corredor Ezekiel Elliott, que pudo reencontrarse con sus antiguos amigos, quienes alcanzaron la décima victoria seguida en casa para la franquicia texana, que está un juego abajo de Eagles en la NFC Este.
