El Liverpool y Real Madrid se verán de nuevo las caras en la Final de la UEFA Champions League; este es un el enfrentamiento que tiene historia y momentos curiosos y vivirá una nueva edición en el Stade de France de Saint-Denis, una revancha para ambos.
La Liga de Campeones se definirá entre los equipos de Inglaterra y España, será la tercera Final en la que se encuentren, pues pasó en los años 1981, 2018 y ahora 2022. La primera vez que se vieron las caras fue Liverpool el vencedor, en 1981 con gol de Alan Kennedy (1-0), eran unos Reds totalmente ingleses y la anotación nació de un saque de banda.
Liverpool, entonces en la cima de su arte con Bob Paisley en el puesto de mánager, accedió a la Final de la entonces llamada Copa de Europa, el 27 de mayo de 1981, en el Parque de los Príncipes de París. Ya con dos títulos en sus vitrinas (1977, 1978), los Reds se enfrentaron al Real Madrid, dominador de los primeros años de la competición continental (6 trofeos en 11 años), antes de conocer una quincena de años de eclipse hasta 1981.
También tienen una eliminatoria de Octavos de Final en la 2008-2009: “Aquí ganaremos por 3-0 y allí les vamos a chorrear”, declaró el presidente interino del Madrid, Vicente Boluda (16 de enero-31 de mayo, 2009), previo a dicha serie que ganó Liverpool 1-0 en la Ida y goleó 4-0 en la Vuelta, una de las goleadas más escandalosas para el cuadro merengue.
2018: Mo Salah y Karius
Era el Real Madrid de Zidane, que llegó a la Final como favorito, luego de par de títulos en 2016 y 2017, soñando con encadenar un tercero en Kiev, cuando el Liverpool de Jürgen Klopp era todavía un equipo en aprendizaje.
Al minuto 30, el delantero Mohamed Salah cayó en una jugada dura obra de Sergio Ramos; de inmediato hubo lágrimas por parte del egipcio, porque sentía aún antes de saber que era una lesión importante en el hombro. Se jugaba, incluso, la asistencia a la Copa del Mundo. Finalmente, esa falta le costó mucho al de Egipto, pues además que de que no siguió en la cancha, por poco no asistía a Rusia.
En el mismo juego, el portero red Loris Karius se quejó de un codazo del propio Ramos, y aunque se mantuvo en el partido y días después se le diagnosticó una conmoción cerebral, a lo que muchos la atribuyeron su desastrosa noche.
El portero alemán cometió dos errores decisivos: un pase interceptado por el delantero Karim Benzema, quien abrió el marcador (51’) y después un error en un disparo lejano de Gareth Bale, que se le escapó inexplicablemente de las manos (83). En el remate acrobático del propio Bale (64’) no había nada más qué hacer.
La felicidad merengue se prolongó por varios días más, no obstante los dichos de la superestrella Cristiano Ronaldo hicieron agridulce una noche histórica: "Fue muy bonito estar en el Real Madrid". Unos días después, CR7 se fue a la Juventus de Turín.
