Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, amenazó este martes con cambiar de sede algunos partidos del Mundial 2026 si él considera que la ciudad que alberga esos encuentros no es segura, como en el caso de Boston, y agregó que eso mismo podría suceder en el caso de Los Ángeles con los Juegos Olímpicos de 2028.
"Si alguien está haciendo un mal trabajo, y percibo que las condiciones son inseguras, llamaría a Gianni (Infantino), el presidente de la FIFA, y le diría: 'Movámoslo a otro lugar'", dijo Donald Trump a los medios de comunicación.
"Podría decir lo mismo de los Juegos Olímpicos, porque, como saben, tenemos eventos en diferentes lugares. Los Juegos Olímpicos se celebran en Los Ángeles. Si pensara que Los Ángeles no iba a estar bien preparado, lo trasladaría a otra ubicación", agregó el mandatario republicano.
Trump no tiene poder para modificar una sede o el lugar de un partido del Mundial 2026, pero mantiene una relación muy cercana con Infantino, quien sí la posee.
Boston podría dejar de ser sede del Mundial 2026
Las palabras de Trump iban dirigidas principalmente hacia la ciudad de Boston, cuya alcaldesa es la demócrata Michelle Wu, y que se encuentra en los últimos meses en el punto de mira de la administración por considerar que interfiere en sus políticas contra la migración.
El Gillette Stadium de Foxborough, un municipio aledaño con Boston, tiene previsto acoger 7 partidos del Mundial, que se disputará entre el 11 de junio y el 19 de julio del próximo año.
¿Qué otras ciudades están amenazadas por Trump en el Mundial 2026?
Estas amenazas se suman a las que lanzó en septiembre contra otras ciudades gobernadas por demócratas, como Seattle o San Francisco, a las que advirtió que podría retirarles partidos del Mundial 2026 si las considera inseguras.
Trump on moving World Cup games from Boston: "We could take them away. Your mayor is not good." pic.twitter.com/TxlWddmdAS
— Aaron Rupar (@atrupar) October 14, 2025
Estados Unidos, que coorganiza el Mundial 2026 junto con México y Canadá, cuenta con 11 sedes, la mayoría en ciudades gobernadas por los demócratas, como Los Ángeles, Nueva York, Atlanta, Houston, Boston o Filadelfia.
