
Cuando la FIFA otorgó el Mundial de futbol a Japón, los ingenieros de aquél país se propusieron realizar una obra que además de poder albergar la máxima competencia de futbol, también pudiera servir al futuro del balompié en el país. Así nació el Estadio Yokohama, que ha sido tan funcional que la FIFA ha organizado Mundiales de Clubes en sus instalaciones.
Con capacidad para 72 mil aficionados, el inmueble cuenta con un techo retráctil, su tecnología permite crear un ambiente “ruidoso” para el futbol gracias a sus paneles que absorben el sonido y lo rebotan hacia la cancha. Esto además de toda la tecnología que tiene en sus tribunas, baños y espacio para prensa.
En su cancha se han jugado 8 Finales del Mundial de Clubes, 1 Final de Copa del Mundo en 2002 y la Final de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde Brasil ganó el oro.
