Luego de la serie de críticas que ha generado la modificación de la regla del juego que contempla que en el penal los porteros serán sancionados con tarjeta amarilla si al momento del lanzamiento no mantiene al menos un pie sobre la línea de gol (pisándola o en el aire si está saltando), se determinó que ya no habrá castigo para el guardameta. Esto lo veremos implementado a partir de los Octavos de Final del Mundial Femenino Francia 2019.
Esto generó que varias penas máximas fueran repetidas en los juegos de la Fase de Grupos, como sucedió en el duelo entre Argentina y Escocia, con la escocesa Lee Alexander que paró el penalti la primera vez ante Florencia Bonsegundo, pero éste fue repetido y la cancerbera amonestada.
Y es que la FIFA solicitó una suspensión temporal a la norma hacía International Football Association Board (IFAB), el organismo que define las reglas del futbol.
La asociación determinó que con el VAR se aumenta en gran medida la probabilidad de que se detecte una infracción y las porteras podrían ser hasta expulsadas y esto propicia "distorsionar injustamente" el resultado de los partidos si se expulsa a una portera por acumulación de tarjetas.
