De pelo rosado y con el gafete de capitán al brazo, Megan Rapinoe se convirtió en el personaje más importante de la Copa Mundial Femenina 2019 tras ganar el Balón de Oro a la mejor jugadora del torneo, además de la Bota de Oro a la máxima goleadora del certamen.
Rapinoe no solo logró ser factor en el ataque de la Selección de Estados Unidos, que ganó el título tras vencer en la Final 2-0 a Holanda, sino también fuera de la cancha al ser una de las mujeres que alzó la voz para expresar sus ideas.
Rapinoe, de 34 años, jugó cinco partidos con el combinado de las barras y las estrellas en el Mundial, logró seis goles, incluido uno en la Final y dio tres asistencias para sus compañeras.
La delantera le anotó a Tailandia, también le hizo un doblete a España, pero su mejor actuación fue ante Francia en los Cuartos de Final donde consiguió otro doblete para dejar fuera a las anfitrionas, además del tanto ante las holandesas.
De esta forma Rapinoe, al igual que su compañera Alex Morgan, se convirtió en la máxima goleadora del Mundial de Francia. De manos de Fatma Samoura, secretaria general de la FIFA, recibió ambos premios.
Hace unos días, la mediocampista señaló que la FIFA no le había dado seriedad a la Final del Mundial al programarla el mismo día que las Finales de la Copa América y Copa Oro.
Además, sus polémicas también estuvieron relacionadas con la política pues decidió no cantar el himno nacional en protesta contra el presidente Donald Trump. Incluso aseguró que si ganaba el título no acudiría a la Casa Blanca.
