Andrés Guardado tuvo la oportunidad de cumplir el sueño de su hijo Máximo, cuando en 2018 logró que conociera a Lionel Messi, su futbolista favorito. Todo esto ocurrió en un partido entre Barcelona y Betis.
En aquella ocasión, el cuadro culé goleó sin piedad 0-5 a los béticos en el Benito Villamarin.
Precisamente fue Leo Messi la gran figura del partido tras anotar un doblete, el último un portento de gol. Incluso, la afición local le aplaudió al futbolista del Barça.
Tras aquella exhibición, el hoy capitán de la Selección Mexicana esperó al astro argentino en los vestidores con su pequeño hijo en brazos. En cuanto la Pulga se apareció, Máximo no ocultó la emoción tras ver a su ídolo, dejando una tierna imagen para la posteridad.
El Principito agradeció al argentino por su gran detalle y compartió el momento en redes sociales.
Hoy Messi juega para el PSG y Guardado sigue jugando en el Betis, pero se volverán a ver las caras en el próximo mes de noviembre en el Mundial de Qatar 2022.
