
Si hay un tiro libre y Lionel Messi está para cobrarlo, es prácticamente un golazo cantado. La Pulga se mandó una soberbia anotación en el juego ante Valladolid este martes en el Camp Nou, gracias a un disparo en pelota parada.
El 10 del Barcelona se acomodó para acariciar la pelota con la pierna zurda, impactó el esférico que dibujó una preciosa comba que se clavó apenas abajo del ángulo superior derecho de la portería defendida por el guardameta Jordi Masip.
El gol 50 de Messi de tiro libre.
— Barcel⚽nisim???? (@JoseRock2085) October 29, 2019
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El arquero no tuvo nada qué ver en el disparo. Al contrario, hizo todo bien para evitar que le marcaran el tercero de la noche; recorrió muy bien su arco, se lanzó a tiempo y estiró toda su humanidad.
Sin embargo, el disparo de Messi fue exacto, perfecto, sin ningún tipo de error y la pelota se anidó en las redes del Valladolid para el 3-1, en un juego que ya está liquidado a favor del Barcelona.