
Corría el minuto 82 frente al Espanyol, partido de la Jornada 7 de la Temporada 2004-2005, cuando Frank Rijkaard, técnico holandés del Barcelona, debutó a Lionel Messi (17 años) como relevo de Deco, autor del gol con el que el cuadro culé terminó imponiéndose en ese partido a los Periquitos.
Esa tarde del 10 de octubre de 2004, la Pulga tuvo como compañeros a Henrik Larsson, Ronaldinho, Samuel Eto'o, Xavi Hernández, Juliano Belletti, Carles Puyol, Víctor Valdés, Oleguer, Giovanni van Bronckhorst y al mexicano Rafael Márquez, quien fichó en 2003 con el cuadro catalán.
Lionel tuvo ese día como acompañante en el banquillo del Estadio Montjuic a Andrés Iniesta, con quien construyó uno de los mejores equipos de los últimos años, y quien había debutado un año antes con el conjunto culé de la mano de Louis van Gaal.

Los jugadores que más sobresalían en el Espanyol eran Raúl Tamudo, delantero español, y Mauricio Pochettino, defensa argentino, quien años después se convertiría en uno de los entrenadores más buscados después de llevar al Tottenham a la Final de la Champions League 2018-2019.