Las tribunas del Estadio Nemesio Diez vivieron un breve episodio de violencia cuando un grupo de aficionados se pelearon entre ellos durante el partido de la Selección Mexicana frente a Bermudas.
El hecho se suscitó en la cabecera local, donde estaba colocada una manta con la leyenda Perra Brava y donde algunos aficionados utilizaban los tambores y las trompetas para amenizar el juego.
Unos cinco aficionados se agarraron a golpes, incluso uno de ellos recibió un puñetazo directo en el rostro.
La pelea duró apenas unos cuantos minutos y fue notoria porque aficionados que no querían estar envueltos en esa violencia se hacían a un lado dejando en el centro a los agresores. Luego todos regresaron a sus lugares y continuaron el apoyo para la Selección Mexicana.
