Para Nicolás Larcamón, el triunfo de 1-0 que logró ante Monterrey solo representa un paso más en la búsqueda del objetivo final, sin dejar de admitir que hacerlo a costa de un oponente tan poderoso y en condiciones complicadas ayuda a que tome un valor extra, ya que volvió a emerger ese Puebla que encanta.
Durante el partido, el equipo enfranjado lamentó la expulsión de Gustavo Ferrareis al minuto 53 en jugada en la que también se marcó un penalti que le detendría Antony Silva a Rogelio Funes Mori, aunque acabó por resistir y sacar un resultado que les ayuda a sostenerse en la cima de la tabla general.
"Los felicité por enésima vez (a los jugadores), porque es un capítulo más de lo que viene siendo este proceso. Nos enorgullece, nos motiva, nos tira para delante. Pero también esas felicitaciones son para las personas que trabajan en el equipo.
"Volvimos a ser el Puebla, lo que hemos destacado en otras ocasiones y vuelve a pasar en cuanto a compromiso y entrega, es positivo para nosotros", añadió.
El estratega resaltó la labor de Antony Silva, portero que por segunda semana consecutiva detuvo un penal, ya que en la fecha 5 también pudo frenar a Julio Furch.
"Lo de Tony viene siendo espectacular, es una pieza importantísima no solamente en el arco sino en el día a día gracias a su experiencia que ayuda a conducir también a los jóvenes; trabaja con un enorme profesionalismo, es sumamente ejemplar y cuando salta a la cancha demuestra quién es".
Respecto al partido ante la Pandilla señaló que cuando estuvieron en igualdad numérica fueron capaces de imponer condiciones en algunos lapsos del partido, y cuando perdieron a Ferrareis cercaron los caminos para no perder la ventaja.
"Nos contenta haber alcanzado el resultado, nos contenta la manera, porque mientras estuvimos 11 fuimos propositivos, buscamos aumentar la ventaja, pero no se dio. Después, por un accidente del partido, termina complicándose, pero mostramos también autoridad sacar adelante el partido para redoblar esfuerzos y nuevamente ser Puebla".
