Tras la polémica en la que hoy se ve envuelto Antonio Mohamed, insinuando que el América le pagó al arbitraje en su duelo ante Pumas, se recuerda que el Turco enfrentó una situación en la que se decía que él y su familia apostaban en contra de Rayados, cuando él era jugador de la Pandilla.
El expresidente del Monterrey, Gilberto Lozano, declaró a Mediotiempo hace algunos años, que despidió a Mohamed en el Verano 2000 no sólo por rendir apenas al 70 por ciento , sino al descubrir que sus familiares apostaban en contra de La Pandilla y él estaba enterado, era cómplice, según el exdirigente.
El Turco siempre ha negado esa versión y Lozano deja en claro que actualmente no tiene pruebas, pero que en su momento las tuvo, al grado de poder echar abajo un contrato jugoso con el Turco.
Le rompió el contrato
Gil Lozano estaba muy molesto por el desempeño del Turco, pero que se viera involucrado en apuestas en contra del equipo, sobrepasaba cualquier situación.
“Estamos hablando de hace 14 años y ahorita ya no tengo los elementos y decirte ‘aquí están estos papeles, las fotografías, los testimonios’, en ese momento los tuve, tan es así que no se me dificultó absolutamente nada cancelar el contrato de Mohamed, un contrato de un millón de pesos al mes, que era el sueldo que ganaba Mohamed”.
A Lozano no le tocó la época en la Mohamed dio dinero de su bolsa para solventar gastos en un viaje a Sudamérica por motivo de la Copa Libertadores 1999, pero destaca que ese lujo se lo podía dar sin problema, puesto que era el único a quien no le debían su sueldo.
Era la Britney de Rayados
“Le podían deber los sueldos a los demás jugadores, pero a Mohamed no; era la mitad de todos los sueldos de los jugadores del Monterrey. Era un trato equivalente a decir 'aquí está Britney Spears' y todos los demás. Mohamed no tiene culpa, porque tú llegas hasta donde te dejan".
“Si a la Directiva dijo ‘pónganme avión privado para que pueda ir tres veces al año a Argentina, déjame que pueda llevarme a las cocineras de aquí a mi restaurant, oye por cierto todas las fiestas las vamos a hacer en La Diosa que es mi discoteca’, el señor negoció muy bien y la Directiva se agacha y dice ‘sí, sí Britney, lo que tú quieras’, es problema de la directiva, no de Britney Spears”.
