Tigres tocó fondo con Daniel Guzmán, estuvo muy cerca de descender en el Bicentenario 2010; la afición felina se metió fuerte en contra del Travieso, culpándolo del mal paso del equipo tanto en esa campaña como en la del Apertura 2009.
Ante esto, el ambiente era muy 'pesado' en el Volcán, con la afición que abucheaba a Guzmán y pedía su salida, por lo que el timonel recurría a una estrategia que recién reveló a David Medrano.
Y es que el Travieso confesó que se colocaba tapones para sus oídos, de esa manera buscaba no escuchar a los aficionado cuando se encontraba en la cancha dirigiendo en el Estadio Universitario.
"Yo pensando que ese estadio tan lleno, si los picaba un poco más, el estadio iba a ser un verdadero Volcán, la prensa lo manejó de una manera diferente".
"Toda la gente se metía conmigo, nadie sabe, me ponía unos tapones (en la banca) para no oír", confesó Daniel a Medrano.
Guzmán terminó cesado de la institución, al igual que la directiva encabezada por Santiago Martínez; su lugar lo tomó Ricardo Ferretti y Alejandro Rodríguez y Miguel Ángel Garza como dirigentes.
