Leyendas de la Liga MX existen de todos tipos, sin embargo, hay pocos como Benjamín Galindo que sin importar el equipo donde militara, la afición le tenía cariño pese a que fuera un rival deportivo, pues el Maestro derrochaba calidad que maravillaba a los amantes del futbol quienes amabas o sufrían cada que cobraba un tiro libre o penal, pues sabían que estaban por ver magia pura.
Piernas privilegiadas
En la historia del futbol mundial, algunos jugadores logran destacar por su notable toque de balón, sin embargo, el Maestro se ganó dicho mote porque se daba el lujo de pegarle con ambas piernas que lo convertía en un especialista de los tiros libres, de larga, media y corta distancia, así como en los penales, situación que actualmente no se ve en la Liga MX.
Figura en todas partes
No importaba la playera que portara porque logró ser histórico con Chivas, Santos, Tampico, también fue ovacionado en Cruz Azul y Pachuca dónde vivió sus últimas estabas como futbolista.
Todo amor
Cuando un jugador o técnico ficha con un equipo que es acérrimo rival, casi siempre divide opiniones entre el público, lo cual no sucedió con Galindo cuando llegó al banquillo del Atlas pues la mayoría lo recibió con los brazos abiertos, sin embargo, no pudo brillar como quisiera y únicamente duró un año (2010-2011).
Multicampeón
Existen ídolos y figuras en algunos clubes que pese a tener el cariño del público, no logran ser trascendentales con títulos, lo cual no sucedió con el Maestro quien fue clave para coronarse con Chivas, Santos, Pachuca y Cruz Azul; su única deuda fue con Tampico.
