Las únicas taquillas enjauladas en la Ciudad de México las tiene el Estadio Azteca. El caos y la mala organización de ventas de boletos es un común denominador en el recinto mundialista. Esta tarde, la situación se tornó más caótica previó al partido entre Cruz Azul y Toluca.
Centenares de personas quisieron aprovechar el buen horario del juego y la doble promoción de adquirir entradas para este juego y para el del miércoles ante Xolos con un rango de precio entre los 200 y 500 pesos. Pero no fue la mejor decisión que pudieron haber tomado, pues las taquillas rebasaron su capacidad y en promedio la espera era de una hora en la fila.
▶ Caos en los accesos del Estadio Azteca; el juego ya comenzó y decenas de aficionados con y sin boleto no han podido ingresarhttps://t.co/PpkEMO6RYF
— MedioTiempo (@mediotiempo) August 14, 2022
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Con solo un elemento de seguridad del Azteca, el enrejado fue protegido, sin embargo, los insultos, gritos y hasta unos empujones no pudieron faltar ante el mal manejo del individuo para controlar la fila de personas que iban a comprar y una segunda fila para aquellas que necesitaban imprimir sus pases.
Cerca de mil espectadores se perdieron todo el primer tiempo por esperar a adquirir un boleto. Además, otra situación que abonó al caos fue que las máquinas por momentos dejaban de funcionar provocando la espera más larga aún.
Otra situación que se originó fue que la reventa aprovechó la desesperación de los aficionados y tuvieron mayor demanda una vez que se escuchó el silbatazo inicial y el gol de Ramiro Funes Mori al minuto 17; la oferta más económica era de 500 pesos y la más cara de 1100.
