Luego de que Mateus Uribe quedó en el ojo del huracán por festejar a su esposa el pasado viernes hasta altas horas de la noche, cuando los Dragones tenían en puerta este domingo el derbi de Oporto ante el
Boavista, el colombiano salió al paso y se disculpó, al tiempo que aseguró que es un profesional.
No obstante, tanto el colombiano como Agustín Marchesín, Luis Díaz y Renzo Saravia, quienes también estuvieron en la fiesta de cumpleaños de Cindy Álvarez, fueron sancionados por el club debido a que lo tomaron como un acto de indisciplina, por lo que no verán acción en el duelo de hoy.
"
Disculpas...Es la única palabra que debo decirles en estos momentos a todas las personas que han enviado mensajes a mi esposa y a mí.
Entendimiento...Es la palabra que yo quisiera que ustedes se llevaran de mí, mi profesionalidad no debe ser puesta en tela de juicio por algunos medios que lo que hacen es exagerar la situación sin saber lo que de verdad sucedió.
"El día viernes celebré el cumpleaños de mi esposa. A la media noche, después que mis compañeros se fueran, me fui a descansar, ya que al día siguiente no teníamos entrenamiento ni nada por el estilo. Mi familia como yo sabemos que la prioridad número uno en estos momentos es cuidar mi estado físico para poder tener el rendimiento óptimo de un jugador profesional de futbol. Mi esposa, sus amigos y su familia siguieron en la reunión porque era en el jardín de mi casa, por esa razón medios y personas ajenas a lo sucedido dicen que estuve hasta las 5 A.M. Cosa que es totalmente falsa", escribió en su cuenta de Instagram.
El Porto está obligado a sacar el triunfo este tarde ante el Boavista para meter presión al líder Benfica, si es que desean mantenerse en la pelea por el título liguero.
