El presidente del Benfica, Luis Filipe Vieira, sospechoso de fraude por la justicia portuguesa, pasó a arresto domiciliario al término de un primer interrogatorio en un tribunal de instrucción de Lisboa, según un documento judicial consultado este domingo por la AFP.
Esta decisión del juez de instrucción Carlos Alexandre está acompañada de la posibilidad de quedar en libertad por una fianza de 3 millones de euros (3,5 millones de dólares).
Luis Filipe Vieira, empresario de 72 años, tendrá prohibido entrar en contacto con los dirigentes del Benfica.
"Estas medidas son manifiestamente excesivas en relación a lo que figura en el acta de acusación", estimó ante la prensa el abogado de Vieira, Manuel Magalhaes e Silva.
Luis Filipe Vieira fue arrestado el miércoles y quedó en detención por una operación bautizada como "Tarjeta Roja".
Las autoridades realizaron uno cuarenta registros en las regiones de Lisboa y Braga, en una investigación por sospechas de abuso de confianza, fraude agravado, falsificación, fraude fiscal y blanqueo de dinero, informó entonces el ministerio público.
El viernes, Luis Filipe Vieira anunció su abandono provisional de las funciones de presidente del Benfica, en un mensaje transmitido por su abogado. Durante esa suspensión temporal, las funciones serán ejercidas por el exfutbolista internacional portugués Rui Costa.
Luis Filipe Vieira dirige el Benfica desde 2003 y su presidencia se ha visto manchada en los últimos años por varios casos judiciales relacionados con cuestiones económicas, que le afectaban directa o indirectamente.
