El Campeón del mundo y mejor jugador del Mundial de Estados Unidos 1994, Romário de Souza Faria a principios del presente año habló sobre el pavor que le tiene a los perros. Lo más curiosos resulta ser que tiene debilidad sobre todo por las razas más pequeñas.
El miedo de Romário por los perros
"Los perros me dan un miedo de cojones, tío. Cuando tenía 13 años, fui a visitar a mi abuela en Jacarezinho y dos chuchos y un pequinés se me echaron encima. Respeto a los perros. Jamás les haré daño", declaró el goleador del Vasco da Gama y Flamengo.
"Pero les tengo pavor. Y un detalle: cuanto más pequeño el perro, más miedo le tengo. ¿Un pastor alemán? Puedo convivir con él. ¿Pero un Chihuahua? Joder, me rompe...". Dentro de las mismas declaraciones, el crack brasileño resaltó la importancia de su padre para conciliar el sueño.
Romário expresó que él jugaba con su padre junto a las vías del tren que pasaba por su casa en Jacarezinho. El "11" comentó que cuando él era pequeño tenía asma y no lograba dormir adecuadamente, por lo que su padre intentó ayudarlo.
El jugador Blaugrana compartió que su papá lo llevaba a jugar unos 10 o 15 minutos y posteriormente regresaban a casa sobre las 11 o 12 de la noche. Finalmente, al volver a su hogar, Romário lograba dormir "como un tronco". El futbolista brasileño recalcó la importancia de su padre en su vida.
