
David Beckham, accionista de Inter Miami y una de las personas que más influyó para que el argentino Lionel Messi pasara a la MLS, se refirió por fin a la contratación, una de las más estruendosas en la historia del campeonato norteamericano.
El ahora empresario explicó en una plática desarrollada en la Sinagoga St. Johns Wood United de Londres que no sabía de la respuesta positiva de Messi hasta que se despertó, cuando un sinfín de mensajes llenaron su teléfono.
“Hace algunas semanas, me desperté y tenía un millón de mensajes. Pensé: ‘¿Qué habrá pasado? Porque usualmente no recibo esta cantidad de mensajes’. Ahí fue cuando lo escuché: Leo confirmó que venía a Miami, aunque obviamente para mí no fue una sorpresa”.
Un halago tener a Leo
Beckham añadió que su compromiso de llevar los mejores jugadores posibles del mundo se mantiene, pero es consciente que el caso de Leo es muy especial.
“Siempre tuve ese compromiso con los fans. Por eso, cuando escucho que uno de los mejores jugadores del mundo -tal vez, el mejor-, que ganó todo, que todavía es un gran jugador, es joven y hace lo que hace, quiere jugar en mi equipo, es un momento increíble para nosotros”.