
Con el proceso de Julián Quiñones para integrarse oficialmente a la Selección Mexicana muy avanzado, la imaginación empieza a volar sobre cómo podría jugar, con la gran posibilidad de que se convierta en un aliado de Santiago Giménez en el ataque.
Si bien Henry Martín y Raúl Jiménez tienen un rol preponderante en el ataque representativo nacional, no son pocos los que piensan que Giménez puede ocupar su lugar, y cuando eso suceda podría ser con Julián como acompañante.
¿Cómo jugarían Giménez y Quiñones juntos?
Al respecto, en entrevista con TUDN, Christian "Chaco" Giménez reveló que las características de ambos se pueden complementar, ya que Santi juega más por el centro, mientras que Julián puede estar por los costados, como mejor le fue en el Atlas.
"Tienen características diferentes, Santi no es un '9' quieto, ahora se está tirando un poco más atrás, Julián se tira un poco más a la banda, sería un buen complemento, Julián tiene esa virtud de que los '9' que no son tan movedizos los potencia pero se puede asociar con uno que se mueve, Julián tiene una potencia enorme, intenta llegar al área, asistir, tiene todos los condimentos.
"Está como en los últimos dos o tres años en los top de los últimos delanteros de México, puede aportar a Santiago, a Henry, a Raúl Jiménez porque tienen características diferentes, puede jugar como extremo o doble '9' o media punta también y él mismo se genera los espacios, es buen jugador y puede ayudar mucho".
Las críticas por ser naturalizado
Chaco fue uno de los jugadores que se naturalizó mexicano y fue llamado a la Selección, aunque en su caso no hubo forma de ganar la aceptación de críticos y afición en general, hecho no frenó sus deseos de estar ahí.
"El solo hecho de estar convocado, sea naturalizado o mexicano, es una presión. La verdad que cada vez que me tocaba ir a la selección lo hacía con orgullo y sentimiento, lo que le decía a Santi que ir a la selección de tu país es lo mejor que te puede pasar como futbolista. Viví poquitos momentos buenos y después un caos total, pero yo sentía esa presión, quería jugar en la selección, amo a este país y quería defender a muerte. Cuando jugué en el Azteca y me tocó jugar contra Honduras y cantar el himno vi que el sentimiento era muy fuerte de jugar con México".