La exigencia deportiva en torno a la Selección Mexicana probablemente ni los políticos la tienen en nuestro país, todo lo que los futbolistas hacen es seguido con microscopio por la prensa y los aficionados, que no dudan en recriminar un mal partido o mal torneo, pero pocos entienden que por la mente de los jugadores no solo pasa el deporte, también los problemas personales.
Prueba de esto es lo que Gerardo Arteaga, integrante del Tricolor y del RKC Genk de Bélgica, confesó al Werevertumorro en una entrevista publicada este martes en YouTube sobre la depresión que sufrió al encontrarse totalmente solo a miles de kilómetros de su país y sus familiares.
"Estuve siete meses solo en Bélgica, mi novia estuvo solo tres meses como turista y se regresó (...) Aquí estaba solo, encerrado. Como no hay mucho que hacer aquí en Genk y la vida es muy diferente a lo que sabemos en México, donde agarras tu coche y te vas a donde quieras, aquí no. Hasta la comida era una batalla para mí, no tengo ningún amigo en Genk, nadie que hable español conmigo", comentó el lateral izquierdo que recién cumplió su segundo año en Europa.
"Entré en depresión porque en dos o tres meses ni siquiera dormía en mi cuarto, me quedaba en la sala con la televisión prendida porque me sentía muy solo. Llegaba de entrenar, aventaba la mochila y me sentaba en el sillón sin comer ni cenar, estaba deprimido y me sentía muy culero", añadió.
Para entender qué tan importante es el tema personal en el rendimiento profesional de un futbolista, el mexicano -que ya es seguido por clubes de España e Italia- ejemplificó cómo la presencia de su pareja le permitió vivir sus mejores momentos con el club belga, con el que jugó 42 partidos, metió dos goles y puso cuatro asistencias.
"Estando mi novia aquí me cambió todo, lo vi porque los tres meses que ella estuvo fueron mis mejores, llevaba quién sabe cuántas asistencias y hasta goles metí. Pero cuando se fue recaí culero, otra vez regresar de entrenar y que no haya nadie, que despiertes y nadie te diga: 'Ten un buen día' es horrible", dijo.
¿Por qué Arteaga rechazó ir a Juegos Olímpicos?
Una polémica decisión que incluso le acarreó ser ignorado de la Selección Mayor fue rechazar los pasados Juegos Olímpicos de Tokio, en los que el Tri obtuvo la medalla de Bronce a las órdenes de Jaime Lozano, pero el futbolista surgido de Santos Laguna confesó al Werevertumorro que "su mente no podía más" con el hecho de estar lejos de sus seres queridos.
"Cuando voy a Selección (previo a JJ.OO.) estuvimos también como tres semanas concentrados en Estados Unidos e igual me sentía encerrado. Volvemos a México al Centro de Alto Rendimiento y allá también encerrado, tampoco iba a tener vacaciones porque de México nos íbamos directo a Tokio y acabando los Juegos volaba directo a Bélgica", recordó el futbolista de 23 años.
"Ya no aguantaba, tenía un año sin ver a mis papás y hermanos, buscamos soluciones, lo hablé con Jimmy Lozano para que me dieran la opción de ir a Guadalajara unos días y me dijeron: '¿Vas o no vas a los Juegos?'. Me agarré los huevos y les dije: 'No'. Obviamente quería ir, yo estaba llorando, pero sabía que si iba a los Olímpicos algo no iba a estar bien en mi cabeza".
Escucha a Gerardo Arteaga a partir del minuto 15:15
