El luchador Rayado sabe lo que es luchar arriba y abajo del ring. El gladiador ha probado un sinfín de oficios, pero con el paso de los años pudo consumar dos que son su gran pasión: ser luchador profesional y tener su estética donde pretender "dar clases en cuestión de cultura de la belleza", según relata a Telediario.
Y es que Rayado sabe lo que es picar piedra y no rendirse hasta cumplir sus sueños, pues antes de ir a la lucha libre probó otros oficios: "Fui albañil, plomero, lave tinacos, carros, no me da pena decirlo, porque nunca me dediqué a robar", explica el gladiador, quien incluso ahora planea sacar su propia marca de cerveza y mezcal.
????#LosCampeonesDel6 Conoce la historia de "rayado" el luchador más "estético" del pancracio, pues tiene su propia barbería.
— @telediario (@telediario) October 5, 2021
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Rayado se ha tenido que diversificar ya que "la Lucha Libre no te da para vivir", así que abrió su estética a la cual nombró: "The Beauty of lucha libre" y que se encuentra en la Plaza de la Belleza, ubicado en la calle 5 de febrero, en el centro de la Ciudad de México.
Inició tarde en la lucha libre
Rayado explicó que es consciente de que su carrera luchística la comenzó tarde, pero no se arrepiente pues desde el día uno en que comenzó a entrenar lo hizo al cien, por lo que considera que no ha defraudado a nadie y eso para él es lo más importante.
"Inicié un poco más grande (a entrenar), eso no me quitó nada, al contrario estoy contento porque después de esos nueve años que entrené, ahora llevamos ya cuatro como profesional, estoy contento porque siento que no he defraudado a nadie.
"Logré entrenar en el Consejo Mundial de la Arena México, llegué y me senté en el mismo lugar en el que me senté cuando fui a la Arena México", remató el gladiador.
