Carín León es la cara del regional mexicano, un género que ha retomado fuerza gracias a artistas como él, pues se trata de un cantautor que tiene los objetivos claros pero -sobretodo- que ama la música, según sus propias palabras anoche en el Estadio GNP, recinto que hizo explotar con un recorrido por temas icónicos de y para nuestro país, además de su discografía.
El ‘Boca Chueca Tour’, nombre que hace alusión a su álbum más reciente, fue un auténtico goce para el público, que disfrutó de más de tres horas y media de una puesta en escena singular con talentosos músicos en vivo, quienes crearon una atmósfera en la cual Carín brilló por su gran voz, aunque aún más por su humildad y respeto al escenario.
Para quienes no teníamos conocimiento sobre el setlist, que el artista nacido en Hermosillo, Sonora interpretara más de 35 canciones fue sorpresivo y más parecido a un palenque que a los conciertos que suelen celebrarse en el antes llamado Foro Sol, aunque -a decir verdad- que el acomodador advirtiera sobre la duración y el número de canciones le quitó un poco la ‘sorpresa’.
El concierto puede dividirse en tres actos, el primero totalmente Carín León. Canciones como The One, Como Duele Equivocarse, Casi Oficial, Te Lo Agradezco, Aviso Importante o Despídase Bien encendieron al público, complementadas por momentos ‘clutch’ en los que aparecieron Maluma, Matisse y Pepe Aguilar interpretando sus respectivas colaboraciones con el hombre de la noche.
Fue Aguilar -tras interpretar Por Mujeres Como Tú- el encargado de fungir como vínculo para el segundo acto, en el que hicieron su aparición el español Manuel Carrasco y los sumamente vitoreados Grupo Frontera para poner a las aproximadas 65 mil personas presentes casi al unísono con Alch Sí y Que Vuelvas, solamente un preámbulo de la locura que se volvería el recinto con la entrada de Panteón Rococó.
Y es que, ¿quién se resiste a cantar ‘Y la carencia, arriba, y los salarios, abajo’? Carín León supo aprovechar tal momento para recordar al gran Willie Colón con Talento de Televisión, romperla con La Boda del Huitlacoche y pasar a la tecnobanda con rolitas como La Noche que Chicago Murió y Ramito de Violetas; el de Sonora demostró su respeto y conectó al público trayéndoles la historia de la música mexicana.
Arriesgó el cantante con un medley en homenaje a José José en el que siguió demostrando su habilidad de presentación en vivo y su poderosa voz al cantar Gavilán o Paloma, Preso y La Nave del Olvido, solamente para seguir con otro par de covers: Tatuajes y Un Idiota, de Joan Sebastian.
'Mis canciones, a chin... a su mad...'
En el inter (y ya formando parte del tercer acto) cantó El Tóxico y Primera Cita, sin embargo, dio la sensación de que ‘perdió’ mucho tiempo en esas grandes canciones que no son suyas y dejó a sus fans con deseos de un par más de su autoría como Una Vida Pasada, Por Eso Bye u Otra Vez, estas dos últimas pertenecientes a ‘Boca Chueca’, aunque tampoco fue un cabo suelto, pues Carín sabía que “ya mis canciones, a chingar a su madre (sic)”.
Chalino Sánchez y José Alfredo Jiménez retumbaron en el recinto ubicado en la Ciudad Deportiva de la Magdalena Mixiuhca para finiquitar la obra que terminó alrededor de las 01:30 horas del domingo, dejando a los asistentes sin transporte público pero con la sensación de un concierto que superó las expectativas en lo que pasó de ser “un pedo a una peda”, según el propio Carín León.
