Editorial Mediotiempo
Estadio Maracana
Del drama que vivió en Atenas 2004, ahora Vanderlei Cordeiro de Lima sorprendió al mundo como la persona encargada de encender el pebetero olímpico en la ceremonia de inauguración de Río 2016.
Con el Rey Pelé descartado desde temprana hora del viernes por problemas de salud, se abrió la incógnita de quién sería el elegido para el momento culminante de la apertura de los Juegos en el Estadio Maracaná.
Se mencionó al extenista Gustavo Kuerten como fuerte posibilidad, pero él solo fue el primero de los relevos finales en Maracaná. Le siguió la exbasquetbolista Hortencia, y finalmente apareció Vanderlei.
Este nombre no aparecía entre los candidatos para encender el pebetero, pero al final no solo resultó una sorpresa, sino que de algún modo se le hizo justicia por el drama que vivió en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Vanderlei corría como líder en el maratón ya en el tramo final rumbo al estadio olímpico cuando un pastor irlandés de nombre Corfnelius Horan literalmente se abalanzó sobre el brasileño, lo frenó, cayeron al piso cuando las tardías fuerzas de seguridad llegaron y Lima volvió a tomar la ruta del Maratón.
Ya desconcentrado por el incidente, cansado y con el ritmo roto, fue rebasado por dos competidores, por lo que se quedó con la medalla de bronce. Y a 12 años de distancia de aquel dramático suceso, le correspondió ser protagonista en la inauguración de Río 2016.
Con el Rey Pelé descartado desde temprana hora del viernes por problemas de salud, se abrió la incógnita de quién sería el elegido para el momento culminante de la apertura de los Juegos en el Estadio Maracaná.
Se mencionó al extenista Gustavo Kuerten como fuerte posibilidad, pero él solo fue el primero de los relevos finales en Maracaná. Le siguió la exbasquetbolista Hortencia, y finalmente apareció Vanderlei.
Este nombre no aparecía entre los candidatos para encender el pebetero, pero al final no solo resultó una sorpresa, sino que de algún modo se le hizo justicia por el drama que vivió en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Vanderlei corría como líder en el maratón ya en el tramo final rumbo al estadio olímpico cuando un pastor irlandés de nombre Corfnelius Horan literalmente se abalanzó sobre el brasileño, lo frenó, cayeron al piso cuando las tardías fuerzas de seguridad llegaron y Lima volvió a tomar la ruta del Maratón.
Ya desconcentrado por el incidente, cansado y con el ritmo roto, fue rebasado por dos competidores, por lo que se quedó con la medalla de bronce. Y a 12 años de distancia de aquel dramático suceso, le correspondió ser protagonista en la inauguración de Río 2016.
