Editorial Mediotiempo
Estadio Olímpico Universitario
Tras el fracaso de Pumas en el Apertura 2017, David Patiño aceptó que ha sido un certamen muy malo luego de sumar 10 derrotas y tres empates, pero confía en tener la oportunidad de seguir dirigiéndolos.
“Es un torneo para olvidarlo, sin duda, pero es un torneo que debe dejarnos enseñanzas y corregir lo que haga falta”, externó tras el empate 2-2 ante Santos en CU.
Aunque los resultados no lo han acompañado, Patiño insistió en que la directiva le tenga confianza para el Clausura 2018.
“Han visto cómo se ha desempeñado el equipo, han visto las ideas plasmadas en dos semanas, es poco tiempo para poder cambiar muchas cosas, sin embargo, logramos cambiar la inercia negativa”.
“Más allá de que hemos tenido malos resultados, el equipo ya refleja lo que a mí me gusta en términos de espíritu e intensidad. Al final soy institucional y la directiva lo evaluará. Amo a Pumas, lo traigo en mi educación y mi formación”, señaló.
Sobre los reclamos que hicieron los integrantes de la barra Rebel al equipo en el entrenamiento del jueves pasado, el entrenador aceptó que están en deuda con la afición tras ser el último lugar general.
“Por supuesto que nuestra afición está decepcionada porque el equipo no da los resultados que se esperan y tienen ese derecho.
“Resalto la grandeza de mis jugadores que dieron la cara ante ellos y también de la porra porque me parece que era una situación complicada y ambos expusieron sus puntos”, dijo Patiño.
Agregó que la situación destacó porque los jugadores aceptaron este tipo de reclamos atípicos para una porra como la Rebel.
“Es un torneo para olvidarlo, sin duda, pero es un torneo que debe dejarnos enseñanzas y corregir lo que haga falta”, externó tras el empate 2-2 ante Santos en CU.
Aunque los resultados no lo han acompañado, Patiño insistió en que la directiva le tenga confianza para el Clausura 2018.
“Han visto cómo se ha desempeñado el equipo, han visto las ideas plasmadas en dos semanas, es poco tiempo para poder cambiar muchas cosas, sin embargo, logramos cambiar la inercia negativa”.
“Más allá de que hemos tenido malos resultados, el equipo ya refleja lo que a mí me gusta en términos de espíritu e intensidad. Al final soy institucional y la directiva lo evaluará. Amo a Pumas, lo traigo en mi educación y mi formación”, señaló.
Sobre los reclamos que hicieron los integrantes de la barra Rebel al equipo en el entrenamiento del jueves pasado, el entrenador aceptó que están en deuda con la afición tras ser el último lugar general.
“Por supuesto que nuestra afición está decepcionada porque el equipo no da los resultados que se esperan y tienen ese derecho.
“Resalto la grandeza de mis jugadores que dieron la cara ante ellos y también de la porra porque me parece que era una situación complicada y ambos expusieron sus puntos”, dijo Patiño.
Agregó que la situación destacó porque los jugadores aceptaron este tipo de reclamos atípicos para una porra como la Rebel.