Conmovido hasta las lágrimas porque la afición coreó el nombre de su hijo luego de la gran actuación que tuvo ante Tigres el domingo pasado, Román Mozo, padre de Alan, narró a Mediotiempo cómo fue que su muchacho logró cumplir el sueño que desde infante imaginó.
"Toda su vida ha querido ser futbolista; toda su vida le ha ido a Pumas y solo está cosechando lo que ha sembrado desde los cuatro años que juega futbol", señaló en las gradas del Olímpico Universitario.
"Fue difícil pero él tenía bien puesta su meta, él quería jugar en Pumas, toda su vida fue su sueño. Fue difícil, fue mucho sacrificio, esfuerzo, ser perseverante, tener paciencia y contar con el apoyo de nosotros".
Mozo se identificó con Pumas porque tanto su padre como su mamá, Patricia Rodríguez, son dentistas egresados de la Facultad de Odontología en C.U.
"Lo recibieron al fin en la Cantera después de tres intentos, fue el tercer intento en el que se quedó a los 16 años, hubo que sacrificar el estar junto a la familia con tal de apoyarlo en su sueño y valió la pena", manifestó don Román.
Residentes del municipio de Nicolás Romero en el Estadio de México, la familia Mozo Rodríguez se mudó a la Ciudad de México para apoyarlo. Inclusive, Alan estuvo a punto de no asistir a la boda de su hermana por hacer Pretemporada en Acapulco con el equipo.
Actualmente, Mozo está más que firme en el plantel titular felino, con un gol y 1326 minutos en el torneo, razones por las que incluso Patiño lo ha candidateado para el Tri.
"Él tuvo que salirse de la casa e irse a vivir con su abuela. Mi esposa tuvo que seguirlo para estar al tanto de él, dejar fiestas, amigos, muchas cosas con tal de cumplir su sueño”, añadió. “El día de la boda de su hermana, casi no asiste por estar concentrado en la Pretemporada, son muchas cosas las que ha sacrificado, pero esto es su recompensa".
Carta de la infancia de @alan_mozo51 @PumasMX pic.twitter.com/s7dpg1n24Y
— De Pumas (@UnAuriAzul) 5 de diciembre de 2018