
Sin conocer su futuro, Iván Marcone entrenó con normalidad esta mañana en las instalaciones de La Noria, luego de que Boca Juniors ofertara 8.5 millones de dólares y que el propio técnico de los Xeneises, Gustavo Alfaro, aceptara que no sería sencillo hacerse de sus servicios.
Marcone realizó cada una de las actividades ordenadas por Pedro Caixinha y se le vio contento con sus demás compañeros, esto pese a que se dijo que se había despedido de todos los integrantes del club.
Sin embargo, la realidad fue que el mediocampista se reunió ayer en el vestidor sólo para expresar su deseo por cumplir el sueño de jugar en Boca, estar con su familia y ser tomado en cuenta por la Albiceleste, sin que esto haya sido una despedida.
Mientras se define el futuro del volante, se resalta que Marcone se reencontraría en Boca con Darío Benedetto y el propio Alfaro si se llegara a dar el pase.