- Los de Torreón tendrán la ventaja de cerrar todo en casa mientras vivan en la Liguilla
Los abrazos al final del encuentro, felicitaciones y el sinfín de sonrisas fueron la mejor forma de festejar de manera discreta el Superliderato General que consiguió esta noche, y el cual ya nadie le podrá arrebatar. Esto también fue el reflejo de que pudieron curarse la herida y el duro golpe que sufrieron tras la derrota en la Final de la Concachampions, ante Rayados de Monterrey, jugando en su casa.
Favor de actualizar flashplayer