La joven Coco Gauff, la gran esperanza del tenis estadounidense, superó el viernes con dificultades la Tercera Ronda del US Open y se ganó un enfrentamiento muy especial contra la exnúmero uno mundial Caroline Wozniacki.
La enrachada Gauff, sexta sembrada en este Grand Slam, tuvo que levantar un set en contra para superar a la belga Elise Mertens (32º de ATP) por 3-6, 6-3 y 6-0.
A sus 19 años, Gauff es la gran favorita del público en la pista central de Nueva York, que busca una heredera para la recién retirada Serena Williams.
Con este apoyo pero también el peso de las enormes expectativas, Gauff ha tenido que remontar hasta ahora sets en contra en dos de sus tres cruces en Flushing Meadows.
La noche del viernes, la joya de Delray Beach (Florida) vio cómo Mertens aprovechaba a la perfección sus oportunidades iniciales y se adelantaba con la primera manga.
En la segunda Gauff sobrevivió al momento decisivo cuando, con 0-1 abajo, salvó hasta cinco pelotas de quiebre y luego fue ella quien rompió el servicio de Mertens.
A partir de esa ventaja, la estadounidense fue agarrando vuelo hasta sellar, con un tercer set en blanco, su decimocuarto triunfo en sus últimos 15 partidos.
Con esa racha, la pupila de Brad Gilbert conquistó este mes los dos títulos más importantes de su carrera, el WTA 500 de Washington y el WTA 1000 de Cincinnati.
"Hago todo lo que puedo para ganar en sets corridos. Estuve ganando en sets corridos las últimas semanas pero una victoria es una victoria. Los partidos a tres sets muestran a todo el mundo que no me voy a rendir sin dar pelea"
Gauff y Wozniacki disputarán un electrizante juego
Subcampeona de Roland Garros el año pasado, Gauff vivirá en los Octavos de Final un apasionante duelo con Caroline Wozniacki, una de las grandes protagonistas en Nueva York en su primer torneo grande tras su vuelta de la retirada.
La exnúmero uno, de 33 años, regresó al circuito en agosto después de más de tres años de retiro, en los que dio luz a dos hijos.
"Es un enfrentamiento que nunca pensé que tendría que jugar. Cuando se retiró, recuerdo que dije: 'Ojalá hubiera jugado contra ella', así que ese deseo se hizo realidad"
