
El receptor de 25 años de los Rams, Van Jefferson, tuvo que salir disparado del So-Fi Stadium al concluir el Super Bowl LVI. Su esposa, que estaba a días de dar a luz según los médicos, asistió al estadio para ver el decisivo encuentro, sin embargo, tuvo que dejar el recinto tras sufrir algunas contracciones. Al conocer esta situación, el elemento del conjunto angelino se dirigió al hospital.
La información la dio a conocer el periodista especializado en NFL, Adam Schefter, en su cuenta de Twitter: "La esposa de Van Jefferson, Samaria, comenzó labores de parto durante el juego y el receptor abierto de los Rams ahora está de camino al hospital".
¡ @VanJefferson12 salió a toda velocidad del SoFi Stadium ????♂️!
— Telemundo Deportes (@TelemundoSports) February 14, 2022
???? El jugador de @RamsNFL tuvo que olvidarse de celebrar el #SuperBowlLVI, pues su esposa comenzó con labores de parto.#NFLEnTelemundo pic.twitter.com/LpmSg8ePCv
Schefter también reveló algunos otros detalles que sucedieron al final del encuentro, como la propuesta de matrimonio de Taylor Rapp a su pareja o las lesiones que sufrieron algunos jugadores durante o después del encuentro.
Van Jefferson no pudo celebrar con sus compañeros la consecución del Vince Lombardi, ya que su deber como padre le exigía desplazarse a un hospital de Los Ángeles, donde su esposa ya estaba siendo atendida por los médicos.
Unas horas después el receptor subió una foto de él con su bebé recién nacido. Una alegría tremenda tras ganar la Final de la National Football League para Van Jefferson.
¿El ganador de la noche? Van Jefferson
— Pete Dominguez (@pedrodomg) February 14, 2022
El WR de Rams fue campeón del Super Bowl, salió del estadio y fue al hospital a conocer a su bebé recién nacido. Día inolvidable supongo. pic.twitter.com/5gunsejZqr
El encuentro entre Bengals y Rams fue sumamente emocionante. Los locales le sacaron el encuentro a los de Cincinnati gracias a un touchdown de Cooper Kupp, quien fue el MVP del encuentro. Con esta victoria, el conjunto angelino suma su segundo Super Bowl.