Ni en las visitas del América, Chivas o Pumas, señaladas como de alta peligrosidad, en el Estadio Nou Camp se toman tantas medidas de seguridad para proteger a los equipos, como lo hicieron hoy para el traslado y llegada del LAFC al inmueble ubicado en el Boulevard Adolfo López Mateos.
Los protocolos de seguridad que normalmente se siguen para un juego se endurecieron esta noche por la visita del cuadro angelino y Carlos Vela, al igual que sucedió el día de ayer antes y durante su estancia en el hotel de concentración.
Los dos accesos a la zona por donde llegan los autobuses fueron bloqueados por elementos de seguridad privada, prohibiendo el paso a todas las personas sin acreditación con acceso total.
El autobús del equipo visitante llegó alrededor de las 19:30 horas rodeado por cinco motocicletas y cuatro camionetas de la Secretaría de Seguridad Pública del Municipio de León, que custodió al plantel desde la tarde de ayer que arribaron a su hotel de concentración.
El operativo se mantendrá hasta que el LAFC deje tierras mexicanas. Una vez que terminé en encuentro los acompañarán hasta el Aeropuerto Internacional del Bajío, donde tomarán un vuelo charter hacia Los Ángeles.
