
Épico, histórico, dramático, emoxionantes, descomunal. Se acaban los adjetivos para describir el juego de este miércoles en Brasil, donde el modesto Defensa y Justicia de Argentina, dio uno de los batacazos más importantes de todos los tiempos y le ganó en casa la Recopa Sudamericana al Palmeiras.
En un duelo que enfrentaba a los Campeones de la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana, el Verdao había ganado la ida 2-1, pero el Halcón vino de atrás, superó un penal en contra y empató el global en la última jugada del encuentro.
Primero de penal, Raphael Vega adelantaba al local al 22', pero 8 minutos después, Brian Romero hizo el 1-1 y le daba esperanzas a los argentinos.
Al 68' una patada sin balón de Viña, dejaba a los verdes con uno menos y eso impulsó al equipo argentino a buscar el resultado.
El tiempo pasó, las oportunidades no llegaban y cuando todo parecía perdido, al 93' llegó el milagro. Marcelo Benítez con un bombazo hacía el 2-1 (3-3 global).
Pero el drama continuaría en la prórroga. 7 minutos de acción y se marcó penal para Palmeiras. El central y experimentado Gustavo Gómez lo cobró y el arquero Unsain lo atajó, provocando emoción, caos y un conato de bronca que terminó con la expulsión de Romero en DyJ.
Así llegó el Final y con ella la tanda de penales, donde el ánimo tuvo mucho que ver y los de Sebastián Becaccece se alzaron con el título continental y sellaron su noche más emotiva e importante de toda su historia.
