
Haciendo caso omiso a los llamados de las autoridades y del mismo club Cruz Azul, un grupo de barristas celestes se dieron cita en las inmediaciones del hotel de concentración para trasladarse en caravana hasta el Estadio Azteca y acompañar el equipo sin importar las medidas de seguridad sanitaria por la pandemia de COVID-19.
Con banderines, instrumentos y hasta bombas de humo, los seguidores acudieron al hotel y aguardaron a la salida de los jugadores para después emprender el camino, detrás de los dos autobuses, hasta el Azteca donde jugarán por primera vez en este Guard1anes 2020.
Cruz Azul regresa al Azteca, ¿y los aficionados también? ????????♂️
— MedioTiempo (@mediotiempo) August 15, 2020
La afición celeste hizo caravana para acompañar a La Máquina en su primer juego en el Coloso de Santa Úrsula del #Guard1anes2020 ???????? pic.twitter.com/IUBuSttgBD
La afición cementera se une a la de Pumas, quienes también se congregaron afuera de Ciudad Universitaria sin importar el brote de coronavirus que hay en la Ciudad de México y el estatus del semáforo naranja en la cuarentena para evitar salir de casa y hacer reuniones en grupos numerosos.
Cruz Azul hará frente a los Bravos de Juárez en punto de las 19:00 horas en el Estadio Azteca, inmueble en el que ya terminaron las obras de remodelación.