
Nunca fue buena idea hacer enojar al Divo de Tepito en la cancha porque te pintaba la cara, pero cuando fue víctima de burlas de Arturo Elías Ayub cuando éste era directivo de Pumas, Cuauhtémoc Blanco lo retó a golpes afuera de un hotel de la ciudad de Veracruz, en aquellos tiempos en los que el jugador comandaba a los espectaculares Tiburones Rojos.
¿Qué le hizo Elías Ayub a Cuauhtémoc?
En una entrevista con el comunicador Gustavo Adolfo Infante, el Cuau recordó que estuvo cerca de agarrarse a trancazos con Elías Ayub, todo esto después de un triunfo del club auriazul en el Puerto y un tenso encuentro en vestidores.
"Yo tuve un problema con Arturo Elías Ayub. Perdimos cuando fuimos líderes con Veracruz contra Pumas y él salió a burlarse de nosotros, yo estaba encabronadísimo porque habíamos sido superlíderes. Nos ganan los Pumas allá, nosotros fallamos muchísimo, iba caminando al vestidor encabronadísimo y Elías Ayub se burló de mí", recordó.
Con la sangre hirviendo, Blanco Bravo le lanzó el reto para "darse de madrazos" en el hotel donde el directivo universitario se hospedaba. Sin "rajarse", Ayub aceptó y fue el entonces presidente del Veracruz el que tuvo que intentar calmar al jugador porque iba dispuesto a repartir candela.
"Imagínate, yo para mis pulgas. Le dije que dónde nos veíamos para arreglar las broncas y quedamos que en el hotel para madrearnos. Fui al hotel a buscarlo aunque Rafael Herrerías (presidente del Veracruz) me dijo que no lo hiciera, pero se burló de mí y no iba a permitirlo".
'Me vale madres de quién sea yerno'; Cuau sobre Ayub
Arturo Elías Ayub está casado con la hija del hombre más rico de México que es Carlos Slim, pero a Cuauhtémoc Blanco le importaba "un rábano" quién era su contrincante, lo que él quería era venganza por las burlas recibidas tras el partido, aunque la cordura reinó tras algunos días.
"Después, Herrerías me dijo: 'Ven a cenar conmigo y con Ayub', le dije que ni madres porque le iba a pegar. Ahí estaba Ayub ese día que lo fui a buscar para arreglarnos, Herrerías me decías: 'No sabes quién es', y yo le gritaba: 'Me vale madres, de mí no se burla el cabrón'. Total que me tranquilicé, días después sí nos fuimos a cenar y hoy somos muy buenos amigos, es un tipazo".
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