Luego del castigo de tres partidos de suspensión que recibió Miguel Herrera por referirse como "puto" al árbitro y llamarle "maricones" a los otros miembros del cuerpo arbitral, la Federación Mexicana de Futbol analiza hacer algunos cambios al reglamento para castigar ejemplarmente.
El Piojo recibió la mencionada sanción porque sus faltas al salir del juego entre Cruz Azul y América fueron catalogadas como insultos y no como un acto discriminatorio, como también pudo ser interpretado porque lo contempla el Reglamento. En ese caso pudo ser suspendido entre cinco y seis juegos.
“Vamos a modificar o tratar de estudiar los reglamentos para poner penas más severas. El caso de las desafortunadas declaraciones del señor Herrera ya fueron juzgadas por la Comisión Disciplinaria conforme a los reglamentos y ya se explicó las razones de la sanción. Obviamente esto nos sirve para analizar qué mejoras debemos hacer”, mencionó el secretario general de la FMF, Íñigo Riestra.
“Claro que seremos enfáticos, claro que buscaremos la forma de hacer más duras las penas. Lo que no vamos a hacer es reaccionar simplemente para castigar a alguien por una mala reacción”.
FIFA mandó la circular del cambio de reglamento de sanciones sobre el racismo en el futbol el 7 de junio de este año, fecha para la cual el reglamento del futbol mexicano ya estaba aprobado y por eso no pudieron hacerse modificaciones.
“En el tema específico de Miguel, se sancionó conforme a los reglamentos vigentes, a partir del cambio de reglamentación de FIFA, julio, post que nosotros aprobamos los reglamentos de la competencia, estamos analizando muchos ajustes”, detalló.
Riestra manifestó que durante la plática con el Piojo, el estratega de las Águilas se mostró arrepentido por los insultos hacia Marco Antonio Ortiz, árbitro de ese encuentro en el coloso de Santa Úrsula.
“Hablamos con Miguel, él está muy arrepentido. Al final del día la Disciplinaria castigó con los elementos que podía castigar”.
