
Un sólo gol, acompañado de mucho carácter, tiene a la Selección de Siria en los Octavos de Final de la Copa Asiática de la AFC por primera vez en su historia, algo inédito para un país sumergido en una guerra que lleva más de 13 años, que ha provocado miles de desplazados, y que al menos en el futbol ha cambiado la situación.
La imagen del periodista sirio llorando mientras intenta entrevistar al entrenador Héctor Cúper le dio la vuelta al mundo por lo emotivo que representa ver al reportero expresar su alegría por un resultado inesperado, tras conseguir el pase a la ronda de eliminatoria directa.
Y es que Siria es un país que se encuentra en medio de una guerra que inició a finales de 2010 y principios de 2011 y que ha provocado crisis humanitarias, con cientos de personas desplazadas de sus hogares, mientras que en el resto del país han tenido que seguir sus vidas en medio de un conflicto que no parece tener fin a corto plazo.
Cúper, el trotamundos que impulsó el milagro
Para lograr este resultado histórico de llegar a Octavos, los reflectores han volteado hacia Héctor Cúper, el veterano entrenador de 68 años que ha dirigido en los grandes clubes de Europa, pero que también se ha aventurado a diversos países como ahora con Siria.
Se trata de un técnico argentino que dirigió a clubes como Mallorca y Valencia, con este último incluso llegó a la Final de la UEFA Champions League. A nivel de selección, el estratega ha dirigido a Georgia y a Egipto, este último en la Copa del Mundo de Rusia 2018.
Cuando inició su aventura con Siria, el estratega habló con Infobae y dejó claro que si la situación del país empeoraba tendría que dejar a la selección. Cosa que no ha sucedido aunque su continuidad está en el aire porque termina contrato en 2024, una vez que se acabe la aventura en la Copa Asiática.
“Desde ya que puede haber complicaciones. Es un país muy golpeado por problemas de fronteras, pero ahora no hay problemas. Damasco es una ciudad tranquila. Yo llegué a trabajar en situaciones peores, como cuando dirigía a la selección de Georgia y estaba en guerra a unos 80 kilómetros. Eso sí, si la cosa se complica (en Siria), yo no me voy a quedar. Eso está hablado con los dirigentes”, dijo el DT en mayo de 2023.
???????? Héctor Cúper emociona a #Siria con la primera clasifiación en #CopaAsiática????
— Filo.news (@filonewsOK) January 24, 2024
???? El DT argentino llega a los libros de historia luego de clasificar al seleccionado por primera vez en su a los octavos de final, y hace llorar a su traductor y a un periodista ???????? pic.twitter.com/4cH7djC9Dh
El futbol de Siria y sus argentinos
En el futbol, Siria está afiliada a la FIFA y su ranking de enero de 2024 la ubica en la posición 91 de 211 federaciones. En este 2024 tienen en desarrollo su liga de Primera División con 12 clubes distribuidos a lo largo y ancho del territorio ubicado en Oriente Medio.
De estos clubes han surgido las convocatorias para la selección, pero Cúper ha aprovechado también que varios jugadores en el mundo con esta nacionalidad sean llamados y defiendan los colores sirios.
En esa lista destacan tres futbolistas que tienen también la nacionalidad argentina: Jalil Elías, Ezequiel Ham e Ibrahim Hesar. Los tres nacieron en Argentina, pero sus abuelos o bisabuelos son los que tienen raíces sirias y por ende tienen la oportunidad de representar a este país. En total son 10 los jugadores que juegan fuera de su país, aunque eso sí, ninguno en las principales ligas de Europa.
Los Octavos de Final
Este 31 de enero, Siria jugará los Octavos de Final frente a Irán, una de las selecciones más fuertes de la Confederación Asiática. El partido representa la oportunidad de seguir escribiendo historia en el futbol de un país que además de guerra ha padecido situaciones como el terremoto de febrero de 2023.
El gol que puso a Siria en esta fase fue obra de Omar Khribin, quien definió la victoria ante India. A ese resultado se sumó un empate sin goles ante Uzbekistán y una derrota contra Australia por 1-0, los cuales marcaron el camino de este equipo que hoy está en Octavos y luchando por seguir haciendo cosas diferentes.