
La Navidad se encuentra más cerca que nunca y, como es costumbre, muchas familias buscarán comprar los insumos necesarios para tener una cena acorde a las festividades. Sin embargo, como cada año, los precios siguen aumentando y los efectos de la inflación cada vez limitan más a los consumidores mexicanos.
Y es que, varios de los alimentos y bebidas que son consideradas durante estas fiestas han aumentado su precio de forma considerable, teniendo algunos un promedio del 20, 30 y hasta 50 por ciento, en el caso de frutas y verduras.
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Y es que, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), entre noviembre de 2022-2023, gran parte de los insumos para estas festividades han incrementado su precio de manera abismal. Tenemos por ejemplo los chiles secos y el chipotle, por ejemplo, los cuales elevaron su precio un 20 por ciento, arrojando en promedio unos 180 pesos el kilo, cuando hace un año costaba 150.
Del mismo modo, elementos como la bebida o la carne no han dejado de experimentar subidas descarriladas. Tenemos que el pescado en algunos sitios del país ha aumentado en casi un 50 por ciento su precio. Mientras tanto, el ponche, cuyo ingrediente principal es la guayaba, eleva su precio hasta un 53 por ciento, pasando de 22 pesos a 33.25.
Este efecto también daña a las bebidas alcohólicas, las cuales han aumentado hasta 20 por ciento su precio, mientras que frutas y verduras crecieron hasta el 50 por ciento en su valor de consumo con respecto al año pasado.
De esta manera, parece que la cena navideña, cada año, deberá sacrificar un elemento extra, pues las familias mexicanas no van a poder costearlas para siempre.