
La falla de un refrigerador obligó a que fueran administradas de emergencia cerca de 1,600 dosis de la vacuna de Moderna contra la covid-19, por lo que los beneficiarios debieron ser inoculados hasta pasada la medianoche.
Cassie Sauer, presidenta de la Asociación de Hospitales del Estado de Washington, señaló que desconocían qué causó el imperfecto, aunque de inmediato pensaron en utilizarlas para evitar su desperdicio, y ahí el Centro Médico Sueco se ofreció para ayudar.
Long line at UW Medicine - Northwest for a vaccination clinic sprung up after freezer emergency elsewhere. Line stretches for several blocks. Still gathering info on what happened. Hundreds here. Line stretches several blocks through campus. pic.twitter.com/KFHUQpCo49
— Evan Bush (@evanbush) January 29, 2021
Dicha institución publicó el llamado en sus redes sociales pasadas las 21:00 horas, lo que generó una reacción inmediata y obligó a 10 instituciones médicas nocturnas a sumarse. Siempre se buscó trabajar con las siguientes prioridades:
- Trabajadores sanitarios de alto riesgo en entornos sanitarios
- Primeros respondedores de alto riesgo
- Residentes de instalaciones de cuidados a largo plazo
- Todos los demás trabajadores en situación de riesgo en entornos sanitarios
- Todas las personas mayores de 65 años o más
- Todas las personas de 50 años o más en hogares multigeneracionales (hogar donde residen personas de dos o más generaciones, como un anciano y un nieto).
Al final, las filas se acabaron hasta las 03:30 horas y se respetaron las prioridades.