En Michoacán podría nacer un nuevo volcán, esto se debe a que existe un enjambre sísmico, lo cual quiere decir que existen pequeños temblores, de los cuales algunos no se dejan sentir por el humano; sin embargo, sí es una actividad importante en el suelo.
Del 1 de mayo y el 8 de junio del 2021 sucedieron 242 microsismos en la región de Uruapan y el corredor volcánico Michoacán-Guanajuato, seis de ellos con magnitudes mayores a cuatro, según reportan investigadores académicos de la UNAM.
En 1997, 1999 y 2006 se dieron este tipo de movimientos en Durango, Chiapas y la Ciudad de México, pero después se detienen y no ocurre nada posterior, pero en Michoacán sí podría provocar un nuevo volcán.
Para Carlos Valdés González, investigador del Instituto de Geofísica (IGf) y actual director del Centro de Estudios Mexicanos (CEM) UNAM-Costa Rica señaló la importancia de monitorear todos esos pequeños sismos, ya que estos provocarían el nacimiento de un nuevo volcán.
Actividad sísmica, deformación del terreno, emisión de gases, manifestaciones hidrotérmicas y alteraciones visibles es lo que se necesita para el nacimiento de un volcán.
Informó que del 1 de mayo al 8 de junio fueron 242 microsismos en Michoacán, mientras que de enero a junio se dieron 305; también en enero de 2020 hubo enjambres sísmicos, así suman cuatro mil 102 sismos.
