Históricamente, los Detroit Pistons han sido caracterizados por ser un equipo feroz y ganador tanto dentro como fuera de la duela en la NBA. No obstante, desde 2005 han sido incapaces de participar en unas Finales de la asociación. Mismo aspecto que la joven estrella, Cade Cunningham busca cambiar al liderar un equipo de campeonato.
De quarterback a base estrella
Oriundo de Arlington, Texas, la vida de Cunningham ha estado ligado al deporte desde antes de que naciera. Esto debido a que su padre, Keith Cunningham, fue quarterback de la Universidad de Texas Tech. Mismo camino que siguió el propio Cade al jugar como mariscal de campo en equipos juveniles.
No obstante, el basquetbol siempre estuvo alrededor de Cade, pues su hermano mayor Cannen fue jugador de los SMU Mustangs, antes de convertirse en jugador profesional en Polonia. Posteriormente, Cannen firmó como entrenador asistente de Oklahoma State.
La esperanza de Detroit
A pesar de tener propuestas universitarias de proyectos atractivos como Duke, Kentucky y North Carolina, Cade decidió apostar por su corazón y se decantó por firmar con Oklahoma State para estar con su hermano. En tan solo una temporada (2020/2021) promedió 20.1 puntos, 6.2 rebotes y 3.5 asistencias.
Para llegar a la NBA, Cuninngham fue elegido con la primera selección global del Draft de 2021 por los Detroit Pistons. En 4 temporadas, Cade ha logrado ser nombrado al All-Star Game (2024), ser campeón y MVP del Rising Stars Event (2022) y ser elegido para el mejor quinteto de novatos (2021).

De esta manera, Cade Cunningham ha expresado en reiteradas ocasiones la felicidad y orgullo que le genera pertenecer a una histórica franquicia de la NBA como lo son los Detroit Pistons. Mismo conjunto con el cual piensa recuperar aquella cultura ganadora y eventualmente crear un equipo de campeonato.
