Editorial Mediotiempo
CDMX
Pocas situaciones podrán ser tan crueles como la vivida por Víctor Guzmán a principios del 2018, cuando dos días después de recibir su primer llamado a Selección Mexica se rompió los meniscos de la rodilla izquierda.
Vivía su mejor momento. Un torneo atrás, el Apertura 2017, había sido el mejor goleador mexicano con ocho goles y una buena actuación con el Tri le habría llevado a ilusionarse incluso con Rusia 2018.
Sin embargo, la lesión que sufrió en un juego contra Tigres le obligó a estar medio año inactivo y le cambió los planes pero no la ambición, pues volvió este torneo y con 3 goles nuevamente es el mejor goleador nacional, con una agradable espina clavada y convocado de nuevo al Tricolor.
“Es una espina de la buena, de la revancha”, dijo a Mediotiempo. “Costó aceptarlo y ver la realidad de las cosas, a veces estamos en un nivel muy bueno y el día de mañana no sabemos qué pueda pasar”.
El atacante ha sido clave en el resurgir de su equipo este torneo con 3 goles en los últimos 3 juegos. Los Tuzos empezaron con 3 derrotas pero las compensaron con 2 triunfos y 2 empates más adelante. Con ello el Pocho termina por sobreponerse anímicamente a los difíciles meses de su recuperación, pues se perdió 13 juegos de Liga y 4 de Copa el semestre anterior.
“Hasta ahorita sí ha sido lo más difícil (en su carrera) y más por el momento que estaba pasando”, recordó.
Afortunadamente su juventud le ayudó para reaparecer antes de lo planeado y con 22 años de edad se enfoca en Qatar 2022, donde tendría 26, en plenitud de facultades. Por ello destaca su llamado para los amistosos contra Uruguay y Estados Unidos el 7 y 11 de septiembre en Estados Unidos, dirigidos por el Tuca.
“Anímicamente cada día me estoy sintiendo mejor, fue un momento difícil el regresar, es una de las peores lesiones y no se la deseo a nadie, la verdad es algo complicado”, añadió.
“Pero me enfoqué mucho en mi recuperación, gracias a Dios estoy joven y es una parte que me ayudó. He trabajado la pretemporada para estar al parejo del equipo y a un nivel óptimo”.
Vivía su mejor momento. Un torneo atrás, el Apertura 2017, había sido el mejor goleador mexicano con ocho goles y una buena actuación con el Tri le habría llevado a ilusionarse incluso con Rusia 2018.
Sin embargo, la lesión que sufrió en un juego contra Tigres le obligó a estar medio año inactivo y le cambió los planes pero no la ambición, pues volvió este torneo y con 3 goles nuevamente es el mejor goleador nacional, con una agradable espina clavada y convocado de nuevo al Tricolor.
“Es una espina de la buena, de la revancha”, dijo a Mediotiempo. “Costó aceptarlo y ver la realidad de las cosas, a veces estamos en un nivel muy bueno y el día de mañana no sabemos qué pueda pasar”.
El atacante ha sido clave en el resurgir de su equipo este torneo con 3 goles en los últimos 3 juegos. Los Tuzos empezaron con 3 derrotas pero las compensaron con 2 triunfos y 2 empates más adelante. Con ello el Pocho termina por sobreponerse anímicamente a los difíciles meses de su recuperación, pues se perdió 13 juegos de Liga y 4 de Copa el semestre anterior.
“Hasta ahorita sí ha sido lo más difícil (en su carrera) y más por el momento que estaba pasando”, recordó.
Afortunadamente su juventud le ayudó para reaparecer antes de lo planeado y con 22 años de edad se enfoca en Qatar 2022, donde tendría 26, en plenitud de facultades. Por ello destaca su llamado para los amistosos contra Uruguay y Estados Unidos el 7 y 11 de septiembre en Estados Unidos, dirigidos por el Tuca.
“Anímicamente cada día me estoy sintiendo mejor, fue un momento difícil el regresar, es una de las peores lesiones y no se la deseo a nadie, la verdad es algo complicado”, añadió.
“Pero me enfoqué mucho en mi recuperación, gracias a Dios estoy joven y es una parte que me ayudó. He trabajado la pretemporada para estar al parejo del equipo y a un nivel óptimo”.