
Pese a la mala situación económica que el Barcelona vivió el pasado mercado de fichajes, el conjunto culé pudo contratar a muchos jugadores de talla mundial para reforzar el equipo como Robert Lewandowski, Jules Koundé, Andreas Christensen y Raphinha, por mencionar algunos, sin embargo, se consideraba que estos movimientos serían inviables para el equipo por la masa salarial.
Sin embargo, en el XVII Congreso de la Asociación Española de Derecho Deportivo, Jordi Cruyff -director deportivo del Barcelona- aseguró que el dinero no fue un problema, ya que muchos de los fichajes prefirieron jugar en el gigante europeo antes que embolsarse millonarias cifras.
"Hemos visto que muchos jugadores estaban dispuestos a hacer ajustes económicos impresionantes para poder firmar por el Barça. Eso me sorprendió, que prescindieran de dinero para venir. Es una ventaja".
El directivo lo dejó claro y aseguró que la única razón por la cual decidieron 'perdonar' dinero es porque querían vestir la elástica culé y ser parte de la reestructuración del equipo.
"Podrían haber cobrado mucho más y han venido porque les hacía ilusión jugar en el Barça. Eso ayuda mucho", sentenció Cruyff, que junto a Mateu Alemany han sido dos piezas fundamentales para sanar la economía del Barcelona.