El Leganés vivía un sueño de hadas en el Reino de Navarra ante Osasuna y en el último minuto los despertaron un con un gol doloroso que los mantienen lejos de los puestos de la salvación y ahora esta ilusión de seguir en Primera División cada vez más se le complica. El 2-1 en contra es un resultado injusto para todo lo que hicieron en el juego.
Los Pepineros, dirigidos por el mexicano Javier Aguirre se quedan con 25 unidades y la salvación luce complicada porque el Celta le empató al Barcelona y porque Eibar tiene un juego menos, además de que se colocan a un punto del Mallorca que está en la frontera entre la salvación y el descenso.
El Osasuna se puso al frente en el marcador con solo nueve minutos en el juego. Una chilena de Enric Gallego fue suficiente para mandar guardar el balón en las redes de los Pepineros que tuvieron que sacudirse rápido para ir al frente.
Sumar puntos era más que necesario para el Leganés, el empate de Celta ante Barcelona los alejó de la zona de peligro y por eso el Vasco no tuvo más que mandar a su equipo con todo al frente, a pesar de que no pudo contar con su goleador Oscar, por una lesión.
Aguirre en el banquillo se desesperaba de ver cómo su equipo era mejor en el campo, pero les hacía falta ese último toque para poder empatar el marcador y fue en el inicio del segundo tiempo que con un golazo desde tres cuartos de cancha que igualaron el marcador.
El gol de Javier Avilés fue una descarga de energía para los Pepineros que festejaron con todo y el mexicano de solo volteó al cielo y levantó las manos agradeciendo, pero no contaba con que en la última jugada de nueva cuenta Gallego los aniquilaría con un certero cabezazo.
