
Que los futbolistas recurran a los engaños para ser beneficiados por el arbitraje es algo que se da en todos los niveles y en todas las ligas; incluso, hasta el mejor jugador del mundo recurre a esas 'mañas'.
Y es que basta con recordar la Final del Mundial de Clubes 2009, entre Barcelona y Estudiantes de La Plata, un duelo que pitó el árbitro mexicano, Armando Archundia, y que tuvo que mostrarle la tarjeta amarilla a Lionel Messi, porque intentó engañarlo.
"En la foto que yo tengo es amonestado uno de los mejores jugadores de la historia del futbol por simular una falta, imagínate si a esos niveles lo hace la gente que tiene la capacidad, es parte de la chispa, no debería de ser, entendemos esta situación, pero es la forma de jugar desde amateur, hay jugadores que los tocan y gritan como si los estuvieran herido fuertemente, pero es parte de la formación de cada quien… no ha desaparecido la simulación en su totalidad, sí en las áreas de penal porque es lo que revisa el videoarbitraje, pero una falta la puede simular a mitad de cancha y el VAR no la va a revisar si es tarjeta amarilla", recordó a mediotiempo.
Desmentir al mejor jugador del mundo en la cancha no es fácil, pero a Archundia no le tembló la mano y dejó callado a la Pulga, cuando éste insistía en que le habían pegado, pero el silbante le llevó la contraria y lo dejó en silencio con la amonestación.
"Ahí está la foto atrás, simplemente es tarjeta amarilla, no tienes que decir más, te dice 'oiga me pegaron', ¡se tiró! Listo, tarjeta amarilla, no puedes decirle nada, no puedes decirle que es un tramposo, hay que respetarlos", dijo.
¿Te sorprendió que el mejor jugador del mundo recurriera al engaño?
"No me sorprende porque son seres humanos y cuando es competitivo y obtener un resultado, buscas todos los recursos que sea para obtener el resultados… Ya es de los formadores, no es ganar por ganar, desde los 6 a los 12 años el resultado sale sobrando… juega para ganar pero acepta la derrota con dignidad".
Un 'crack' para no regalar penales
Archundia reveló que nunca le tocó marcar un penal inexistente, pues tenía una estrategia para identificar los engaños dentro del área e incluso, esa forma de analizar se la ha dicho a otros colegas para que no caigan en esos errores.
"No me tocó marcar un penal que no era, todos los que sancionaba había elementos para decir que la falta fue correcta, a lo mejor dejé pasar penales que sí eran, pero que me haya ido engañado por alguien que simuló, no; además me aprendió mucho las formas de caer de los jugadores, al que le cometen una falta el jugador cae medio descompuesto, cuando no, caen en una posición muy cómoda para no lesionarse y de inmediato voltean a verte a ver si estabas cerca o mal ubicado para tomar decisión, eso lo aprendí y era muy difícil que yo tomara una decisión errónea en ese sentido", indicó.
Armando Archundia es uno de los mejores silbantes que ha tenido el futbol mexicano, tiene en su currículo dos Copas del Mundo (Alemania 2006 y Sudáfrica 2010), tres Mundiales de Clubes (2005, 2008 y 2009), así como participaciones en cinco ediciones de Copa Oro.